Visitamos la residencia real de en la ciudad de Windsor, un lugar mágico y lleno de historia: el inicio de su construcción data del SXI hasta el reinado de Enrique VIII (S XVI).
Esos muros han reistido el asedio de invasiones, guerra civiles, incendios y el paso del tiempo. Ha crecido en virtud de sus permanentes erificaciones de lujosos espacios palatinos con cuidadosas decoraciones medievales y del gótico tardÃo.
Pudimos ver numerosas pinturas, colecciones de armaduras y vajillas extremadamente lujosas, además de la compleja decoración de cada rincón de las grandes habitaciones y las estructuras
como en la bella Capilla de San Jorge.
IncreÃble experiencia en esta cuidad que ha vivido el paso de generaciones de la familia real hasta nuestros dÃas.
Una vez de vuelta cenamos y compartimos una grata velada en torno a una fogata... que termino en emocionantes fuegos artificiales!
